lunes, abril 17


Luis Aguilera, Miguel Ángel de la Puente y Juan Roca

Tribuna. Semfyc, SEMI y Semicyuc, contra la especialidad de urgencias, troncal o no

La especialidad de urgencias de carácter troncal planteada por el grupo de trabajo de la Comisión de Recursos Humanos del SNS no convence a los presidentes de Medicina Familiar, Medicina Interna, y Medicina Intensiva. Para ellos, ese grupo ha sido parcial y no ha trabajado con datos objetivos. Proponen una comisión de expertos independientes.

Los lectores son conocedores del debate público acerca de la posible creación de una especialidad de urgencias. Debate que se ha intensificado en estos últimos doce meses entre los diferentes colectivos profesionales y que ha originado posiciones claramente antagónicas y diferenciadas. Con la publicación de este texto, los presidentes de las tres sociedades científicas firmantes, queremos realizar un balance de las ideas fundamentales que se han barajado en este periodo y exponer los argumentos que han determinado nuestra firme posición en contra de esta posibilidad.

Pero antes de presentar dichos argumentos, nos gustaría aportar algunas reflexiones acerca del procedimiento de análisis que se ha empleado hasta la fecha. Creemos que el trabajo que han realizado los diferentes grupos que han recibido el encargo de analizar la posible creación de la especialidad por parte de la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud (SNS) ha sido parcial, y por tanto con importantes carencias. Este grupo de trabajo no ha podido trabajar disponiendo de datos objetivos sobre la situación de la atención a las urgencias que reciben los ciudadanos, ni tampoco ha contado con la participación equilibrada de los colectivos profesionales que trabajamos en los dispositivos de urgencias. En este contexto de trabajo, tenemos que considerar los informes y las valoraciones emitidos parciales, pues en ellos se han obviado la realización de estudios cualitativos y cuantitativos acerca de las necesidades de los ciudadanos en la atención en urgencias o estudios acerca de las necesidades de los profesionales para atender los problemas de urgencia en todos los niveles del SNS.

Por tanto, consideramos que el procedimiento seguido hasta la fecha carece de un análisis técnico y en profundidad de la atención a las Negritaurgencias en España y que tampoco ha hecho un análisis integral de nuestro modelo sanitario.

En conclusión, afirmamos que nos encontramos ante un informe que básicamente responde a una parte de la cuestión, porque se centra en las demandas que realiza un colectivo que está presionando a las administraciones para favorecer la creación de esta especialidad.

Posiciones claras
Pero si valoramos el peso de todas las opiniones y las decisiones, nos gustaría señalar algunos puntos y asegurar que las posiciones están muy claras. Los colectivos profesionales que representamos a la mayoría de los médicos que trabajamos en los dispositivos de urgencias, en los servicios de atención continuada, en unidades de emergencias y en servicios de urgencias de hospitales, y que estamos agrupados fundamentalmente en las especialidades de Medicina Interna, Medicina Intensiva y Medicina Familiar y Comunitaria, valoramos como un grave error la creación de la especialidad de urgencias.

Esta afirmación es compartida por el Consejo Nacional de Especialidades. Las razones en las que fundamentamos esta opinión son las siguientes:

-Los profesionales que hemos realizado en los últimos años la formación por el sistema MIR atesoramos una preparación en conocimientos y habilidades de calidad, pertinente para resolver los problemas urgentes que presentan los ciudadanos. Esta cualificación está planificada y contemplada en los programas de nuestras respectivas especialidades.

-La incorporación de estos especialistas con formación MIR a los diferentes dispositivos de urgencias en los últimos años ha permitido mejorar la continuidad de cuidados a los ciudadanos y la coordinación entre niveles asistenciales. Como es sabido, éste es uno de los problemas más persistentes de nuestro sistema sanitario.

-Es bien conocida la existencia excepcional de la especialidad de urgencias en el resto de países, sean o no de nuestro entorno. El modelo sanitario de nuestro país apuesta por una única vía de entrada al sistema y por un abordaje integral de los problemas de salud.

-Las reformas previstas en el espíritu de la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS) van encaminadas a integrar ámbitos de actuación, recordando que nuestro país tiene aprobadas 48 especialidades, mientras que la media de los países de nuestro entorno (Unión Europea) es de 30. De aquí podríamos entender una parte de los problemas de coordinación dentro del propio sistema sanitario español.

-La creación de la especialidad ocasionaría un incremento del gasto económico sin mejorar la calidad de la atención a los ciudadanos, así como un incremento en la descoordinación entre los niveles asistenciales que sería especialmente importante en el ámbito de las urgencias.

-Un problema derivado de la creación de la especialidad sería que para un mismo ámbito de actuación se dispondría de tres colectivos de profesionales: los médicos sin especialidad que trabajan en urgencias; los médicos de otras especialidades que ya están incorporados y que se seguirán incorporando, y los posibles médicos especialistas en urgencias. Como resultado de ello, introduciríamos un nuevo problema profesional en el sistema sanitario.

En definitiva, estamos ante una decisión controvertida, con posiciones bien diferenciadas y ante la que todavía no se ha realizado un profundo análisis de la realidad.

Entendemos que muchas de las consejerías de salud (es más, afirmamos que sólo una minoría es partidaria de la creación) y que la mayoría de los responsables del Ministerio de Sanidad tienen claro que se cometería un importante error si, hipotéticamente, se aprobara la especialidad de urgencias.

Por tanto, desde las sociedades científicas que representamos seguimos y seguiremos insistiendo en el rechazo a su creación, independientemente de si se hace o no por la vía de la troncalidad.

Expertos independientes
En estas circunstancias de tensa confusión que se ha creado al alimentar con cierta ligereza esta opción entre el colectivo minoritario que lo reclama, planteamos una propuesta de trabajo para el futuro inmediato: empleemos los próximos meses en la realización de un análisis riguroso y en profundidad de la atención de las urgencias en España, recopilando de forma sistemática y ordenada la información para que, en un tiempo prudencial, estemos en condiciones de adoptar decisiones para la planificación de la atención a las urgencias, con unos criterios rigurosos y con el análisis de las necesidades reales, y no como respuesta reactiva a demandas de un colectivo minoritario; demandas lícitas, pero parciales. Para ello proponemos la creación de una comisión de expertos independientes, que realice un análisis exhaustivo de las necesidades de los profesionales, de los ciudadanos y del SNS, con especial hincapié en identificar:

-Un mapa con las competencias que han de tener los profesionales que atienden los procesos urgentes en el medio hospitalario, en la atención continuada, en los servicios de urgencias y en el resto de los dispositivos.

-Un análisis de las necesidades de formación continuada para mejorar la atención de los problemas urgentes, dirigido a los profesionales médicos que trabajan en los diferentes dispositivos asistenciales del SNS.

-Un plan integral de mejora de la calidad en la atención a los problemas urgentes, en el que se incorporen aquellos cambios y transformaciones necesarios, elaborado desde una perspectiva integral del sistema sanitario español.

Los presidentes de las tres sociedades firmantes de esta tribuna estamos convencidos de que la Comisión de Recursos Humanos del SNS adoptará una decisión acorde con su papel de órgano que vela por una visión integral y planificada del sistema sanitario español, evitando dejarse arrastrar por valoraciones coyunturales que podrían ocasionar problemas permanentes en el SNS.
http://www.diariomedico.com/edicion/diario_medico/profesion/es/desarrollo/638230.html

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ante las declaraciones de SEMFYC en relación con la especialidad de urgencias, me gustaría que alguno de sus directivos explicase porqué en mi Distrito el 90% de los médicos de familia se niegan a hacer turnos de atención continuada porque dicen no estar preparados para la atención a urgencias y emergencias.

Ignacio Pérez-Montaut Merino
Socio Semes 2715

Anónimo dijo...

El libro blanco al que se refiere está realizado por semes (http://www.dsalud.com/numero60_1.htm). La opinión del defensor del pueblo es de 1988.

Puntos en común de las diferentes posturas:
1.-La atención sanitaria al paciente es precaria: residentes poco expertos(de cualquier especialidad)utilizados como mano de obra barata, falta de suficiente formación continuada por parte de la Administración;
2.-saturación de las urgencias con problemas no urgentes. Por falta de educación sanitaria de los pacientes, picaresca y falta de personal (y honrosamente remunerado) en Atención Primaria y Urgencias Hospitalarias.

Tener residentes de Urgencias no soluciona esos problemas.
Tener el título de especialista en urgencias no soluciona esos problemas.

Trabajemos todos juntos para mejorar la atención sanitaria, no para atomizar y separarnos aun más.
Divididos, perderemos.