Del debate abierto en Facebook.....
El anuncio que hizo la ministra de sanidad, de creación de 4 nuevas especialidades ha generado diversas reacciones en los médicos españoles, algunas a favor de ellas y, sobre todo, otras en contra de la especialidad de urgencias y emergencias, muy intensas, pero sin que ésto signifique que sean las más acertadas.
La creación de la especialidad de urgencias y emergencias que hace la ministra, supone un importante avance en la homologación de los médicos sin especialidad oficial reconocida que desarrollan su labor en Urgencias y Emergencias desde hace años, pues serían los candidatos posibles para continuar en las plazas que vienen ocupando desde hace años. Al no existir formación reglada en urgencias no hay mejores candidatos a ocupar esas plazas que los que existen. A la vez, se facilita el acceso al título de especialista a los médicos de familia que trabajan en Urgencias y Emergencias, aunque no alcancen el periodo de tiempo trabajado, pues continuarían en sus puestos de trabajo ya que también serían los únicos candidatos posibles para esas plazas.
Como alternativa, SEMFYC propone un área de alta especialización a través de las especialidades de medicina de familia, medicina interna y medicina intensiva. Se da la circunstancia que estas 3 especialidades existen actualmente, el acceso de los pacientes a ellas es escalonado, secuencial y, en la atención programada que todos conocemos, generan listas de espera. Cualquier reproducción en Urgencias y Emergencias de estos esquemas, va a reproducir los mismos defectos. Además, la formación para adquirir todas las competencias del médico de urgencias habría que añadirla al final del periodo formativo de cada especialidad, con lo que lo único que se consigue es un tiempo de formación muy largo, y además se invertiría tiempo y dinero en adquirir conocimientos de cada una de las especialidades de origen que posteriormente tendrían un uso muy limitado y escaso en Urgencias y Emergencias, con lo que se irían perdiendo del bagaje de cada médico.
Más lógico y menos oneroso para la sociedad es iniciar la formación dentro de un sistema troncal con 3 ramas: Urgencias, Medicina de Familia y Medicina Interna, cuyos 2 primeros años serían de formación común y los siguientes de formación específica, lo que permite establecer pasarelas entre la distintas ramas y mejora la distribución de los médicos según necesidades del sistema. No incluyo a la medicina intensiva, pues aunque se manifiesta en términos similares a medicina de familia y medicina interna, no está claro que quieran incluirse en el mismo tronco.
Esta forma troncal de acceso a la especialidad de Urgencias y Emergencias que proponen los actuales y no reconocidos médicos de urgencias y emergencias, va a generar médicos mucho más próximos a los ciudadanos, y más accesibles que si se hace a través de área de alta especialización, cuya puesta en práctica tendría que ser casi específicamente hospitalaria, y en un segundo nivel de atención, y por lo tanto menos próxima al ciudadano y menos accesible.
Finalmente, las 4 nuevas especialidades que anunció la ministra: Infecciosas, psiquiatría infantil, genética y urgencias y emergencias, están reconocidas como tales en Europa, por lo tanto no significan mayor rigidez, pues permite y asegura, el libre tránsito de trabajadores. Por lo mismo, tampoco significa una mayor fragmentación del sistema, sino adecuación del sistema a nuevas necesidades del ciudadano.
Federico Sierra Benítez